Desconocidos
Fotografía bordada, técnica mixta
2020
La pandemia de COVID-19 marcó un antes y un después en la vida de todos. En medio de la incertidumbre, las mascarillas se convirtieron en un símbolo omnipresente, velando rostros y borrando identidades. Este proyecto fotográfico nace de la necesidad de expresar cómo nos transformamos en desconocidos, cómo la expresión y el contacto humano quedaron atrapados tras una máscara de tela. En esta serie, las caras de los modelos están cubiertas con un hilo rojo simbolizando la represión y la desconexión. El hilo rojo se ha empleado ya como símbolo de unión entre personas, este no es el caso, en la serie “Desconocidos” este hilo es una representación metafórica de las mascarillas, una señal visual de cómo fuimos desposeídos de nuestra identidad, obligados a navegar la vida con rostros ocultos y palabras mudas. El rojo, vibrante y profundo, evoca tanto la vida como la amenaza constante, recordándonos la línea fina entre la seguridad y el aislamiento. A través de estas imágenes, quiero invitar al espectador a reflexionar sobre la fragilidad de nuestra identidad en tiempos de crisis, y cómo, bajo la apariencia de protección, nos convertimos en extraños los unos para los otros. Esta serie es un testimonio visual de un período en el que la humanidad se enfrentó no solo a un virus, sino también a la pérdida de lo que nos hace únicos y reconocibles: nuestro rostro, nuestra expresión, nuestros sentimientos, nuestro ser.





